Ya en casa, y sedimentando los recuerdos, mirando notas y machacando internet, me doy cuenta de que la información liquenológica que hay sobre Sudáfrica es tan precaria, que está resultando un triunfo, llegar al menos a los géneros. El caso es que es un país donde la biodiversidad está bastante estudiada, pero los líquenes, … Tras lamentarme un poco sobre la poca información que encuentro, comentaré un poco los líquenes saxícolas que encontramos en el famoso Anfiteatro, del P.N.Royal Natal, en la cordillera de los Drakenberg. Concretamente lo que crece sobre las formaciones Molteno, Elliot y Clarens, formadas por capas de esquistos y areniscas de grano fino del Triásico, y atravesadas por algunos diques de doleritas Karoo, y de 200 metros de espesor cada una de ellas y situadas entre los 1.400 y los 2.000 m . de altitud. Todo ello bajo la inmensa mole de los basaltos Drakenberg, que van desde los 2.000 m . hasta la cumbre más alta de la zona, Mont-Aux-Sources, con sus 3.282 m . Los 15 kilos que pesa Diego en su mochila, a pesar de hacer ya sus marchitas, al final tras 2 horas, acaba en mi espalda, lo que limita el alcance de nuestras expediciones por este impresionante lugar.
Aquí a la sombra de estas impresionantes capas de basalto, de unos 1.000 m . de espesor, pruebas de un vulcanismo intensísimo en esta región de la entonces Gondwana, estas formaciones, por las que pateamos, resultan modestas. Rocas ácidas en las que crecen algunos líquenes, pocos, que me resultan familiares a primera vista, pero que al detalle, ya me confunden. En las superficies verticales, buscando la sombra crecen algo similar a Pertusaria amara, pero ese gusto amargo está ausente. En las zonas soleadas crecen amplios manchurrones naranjas de algo que identifico como Xanthoria marlothii, 2 especies de Caloplaca, algo que me recuerda mucho a Porpidia crustulata, una cosa muy similar a Lecidella carpathica, que creo que es Lecidella euphorea y algo amarillo que recuerda a nuestra Acarospora hilaris, que parece ser que es Dermatiscum thunbergii. Crecen con cierta frecuencia unas Aspicila muy claritas, que me recuerdan A. intermutans. Todo ello con reservas. Líquenes hay pocos ya que crecen amplios pastos secos, que deben de arder todos los inviernos, y que en cierto modo esterilizan las piedras. Por lo demás, grandes jornadas camperas, con unos testigos de excepción: una pareja quebrantahuesos (Gypaetus barbatus).
Si algún lector ve las fotos y le parecen otra cosa, que me lo diga.
Aspicila sp., Royal Natal N.P., kwaZulu-Natal (Sudáfrica), julio 2010
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