En la comarca zamorana de Aliste existe una curiosidad botánica, que es el “sofreral” de Cerezal de Aliste. Es una rareza biogeográfica, ya que es un bosque, no sé si es correcto referirse a él como relicto, de “sofres” o alcornoques (Quercus suber). Es un bosque un tanto disperso, en el que les acompañan una cohorte de melojos (Q.pyrenaica), encinas (Q.ilex) y grandes piruétanos (Pyrus bourgaena), sin llegar a formar una auténtica masa forestal cerrada, todo con un subvuelo de jaras (Cistus ladanifer), creciendo sobre una variada litología de areniscas, cuarcitas y pizarras ordovícicas, que se relacionan con el Complejo Esquisto-Grauváquico, y que afloran como núcleo de sinclinales. No son alcornoques de grandes dimensiones, pero la biogeografía los hace muy interesantes. Demasiado al norte para los alcornoques aunque ha habido “apoyos”, como son los que se han plantado. Es interesante echarle un ojo a www.alcornocal.com . Los que no han sido descorchados presentan una interesante comunidad liquénica que sugieren inviernos de nieblas. Así, sobre las cortezas crecen abundantemente Parmelina tiliacea, Parmelia sulcata, Evernia prunastri, Usnea subfloridana e Hypogymnia tubulosa. En menor medida se encuentran Ramalina farinacea, Chrysotrix candelaris y Melanelia glabratula. Sorprende encontrar en muy escaso número,y con un aspecto calamitoso, dos habituales de los encinares del Oeste zamorano como son Melanelia glabra y Xanthoria parietina. En las ramitas finas, lisas, crece Lecanora albella. Las jaras y los piruétanos están absolutamente invadidos de Evernia prunastri, Usnea subfloridana, Hypogymnia tubulosa e H. farinacea. Entre otras cosas, hay que destacar la presencia de Xanthoria candelaris en la corteza de un fresno que crece en el Arroyo del Lugar.
Aparte de los alcornoques o “sofres”, hay que destacar los grandes piruétanos o perales silvestres. Creo que hacía tiempo que no veía unos tan desarrollados, alcanzando los 5-
Un lugar interesante y solitario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario